Si tienes hipertensión arterial, tratarla puede retrasar o prevenir daños que podrían conducir a enfermedades cardíacas. Esa es la idea detrás de retrasar el desarrollo de la T1D en etapa 3, lo cual puede:1
Cuanto más tiempo tengas T1D, mayor será tu riesgo de complicaciones, incluidas enfermedades del corazón y riñones, daño nervioso y problemas de visión. Retrasar la progresión puede ayudar a reducir el riesgo y la gravedad de estas complicaciones.
Es más fácil manejar la T1D en las etapas tempranas cuando tu cuerpo todavía está produciendo algo de insulina; esto, a su vez, te permite vivir una vida más normal sin tratamientos médicos intensivos.
Como recordarás, las células especializadas en el páncreas llamadas células beta producen insulina. En las etapas tempranas de la T1D, algunas de estas células todavía están funcionando. Retrasar la progresión puede preservar su función, mejorando el control del azúcar en sangre y reduciendo la necesidad de terapia con insulina.
La atención médica es costosa, especialmente para una condición crónica compleja como la T1D. Retrasar la progresión significa menos medicamentos, visitas médicas, hospitalizaciones y pruebas, lo que puede ayudar a reducir tus costos de bolsillo.
Hay numerosos ensayos clínicos que prueban nuevos medicamentos diseñados para retrasar, revertir o incluso prevenir el desarrollo de la T1D. Permanecer en las etapas tempranas de la T1D te hace elegible para estos estudios. Además, podrás probar esos medicamentos que estén aprobados.
Manejar una condición crónica como la diabetes puede afectar la salud mental. Retrasar la progresión puede aliviar parte del estrés y la ansiedad asociados con la enfermedad.
En 2022, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó el primer medicamento para retrasar la progresión a la etapa 3 de la T1D en personas de 8 años en adelante que ya están en la etapa 2. Estás en la etapa 2 de la T1D si has dado positivo para 2 o más autoanticuerpos relacionados con la T1D, tienes niveles anormales de azúcar en sangre y no presentas síntomas.2
Por supuesto, la única manera de saber si estás en la etapa 2 es mediante un cribado.
El medicamento se llama teplizumab. Es un anticuerpo, que es un tipo de proteína que puede reconocer y adherirse a un receptor específico en la superficie de las células inmunitarias llamadas células T. Piensa en ello como insertar una llave en una cerradura. Esto ayuda a «calmar» esas células, para que dejen de destruir las células beta pancreáticas. A su vez, esas células beta mantienen la capacidad de producir insulina, retrasando el desarrollo de la T1D completa.3
La FDA aprobó el teplizumab basado en un estudio llamado AT-Risk. El estudio inscribió a familiares de pacientes con T1D con alto riesgo de desarrollar la enfermedad. Después de 6 años, más de la mitad (55%) de las personas que recibieron teplizumab estaban libres de diabetes en comparación con aproximadamente el 22% de las personas que recibieron un placebo. Teplizumab retrasó la aparición de la etapa 3 por más de 2 años (32.5 meses) en comparación con el placebo, con retrasos más largos en ciertos individuos.4, 5
Los efectos secundarios de teplizumab son leves a moderados. Los efectos secundarios más comunes observados en los estudios fueron erupción cutánea, dolor de cabeza y bajos recuentos de glóbulos blancos.4,5 Muy raramente, puede ocurrir una condición llamada síndrome de liberación de citoquinas (CRS). En el CRS, tu sistema inmunológico responde al medicamento de manera más agresiva de lo que debería. Los síntomas incluyen fiebre, náuseas, fatiga y dolores corporales. Informa a tu médico inmediatamente si experimentas alguno de estos síntomas mientras tomas teplizumab.6
Recibes teplizumab en un centro de infusión todos los días durante 14 días. La enfermera de infusión insertará un IV en tu brazo, permitiendo que el medicamento fluya directamente a tus venas. Cada infusión dura aproximadamente 30 minutos.2
Se realizarán análisis de sangre antes de comenzar con teplizumab y durante el tratamiento para verificar si hay signos de daño hepático o cambios en tus glóbulos blancos y para monitorear infecciones.2
Se están realizando ensayos clínicos para probar numerosos otros tratamientos que actúan sobre el sistema inmunitario. Estos incluyen medicamentos para detener los ataques de las células inmunitarias a las células beta, reducir la inflamación y proteger la función de las células beta.
Puedes encontrar enlaces a esos ensayos en la sección de Recursos de este sitio web.
